domingo, 9 de marzo de 2008

Es una cuestión de estilo...

Hace unos meses publicaba un mensaje en el que hablaba de la envidia y parece que a algunos gustó y a otros "amargó". La verdad es que me reitero en el mensaje y sigo pensando que esa no es mi guerra. Yo no estoy para perder el tiempo ni discutir con mis "compañeras". Creo que debo realizar el esfuerzo en atender a los clientes, en abrir nuevas líneas de comunicación y marketing y en buscar la "excelencia".

Pero lamentablemente mi figura sigue molestando, pero sólo internamente, hecho que cada vez me parece más absurdo e ilógico. Y me gustaría poner un ejemplo del "absurdo": Una persona adquiere su Thermomix. No consigue los libros de recetas de Thermomix que desea y después de mil gestiones llega a hablar con una persona "de dirección" explicando su descontento al respecto. Su última amenaza, visto que no consigue nada, es el buscar recetas en Internet. La respuesta de esta persona fue de los más sorprendente: "Pues ten cuidado, porque hay recetas que 'queman' la máquina, como las de Abigail." Supongo que esta aseveración es más fruto de un 'calentón' que de una realidad comprobada, y lo digo porque "mis" recetas (que en muchos casos son recetas facilitadas por usuarios de gran experiencia en el manejo de la máquina, de presentadoras de Thermomix y hasta de cocineros de primer nivel) a día de hoy nunca han 'quemado' ninguna máquina.

A lo que iba... este post tiene dos fines:
- Me llega mucha información, en algunos casos, demasiada, pero que me ayuda a evaluar lo que piensan de mi (y de las presentadoras que colaboran con Mi Thermomix). En conclusión, me entero de mucho más de lo que creen algunas.
- Recordad a algunas que todo esto es "absurdo". El faltar a la verdad, el crear cortinas de humo para despistar e intentar cubrir errores propios o el "hablar por hablar" no lleva a nada. Bueno, tampoco es verdad, sí lleva... cada una se muestra tal y como es, sin máscaras, sin hipocresía. Y a mi, me da mucha pena que haya personas así, pero el mundo es como es... y yo no lo voy a cambiar (ni me quedan ganas).

Aunque pensándolo bien, igual Napoléon tenía razón cuando decía: "Es más seguro interesar a los hombres por medio de lo absurdo que por medio de las ideas justas"... y yo estoy equivocada.

2 comentarios:

anah dijo...

Para quien quiera leer este comentario: Tengo que decir que el servicio que presta Abigail es inmejorable, tiene una web magnífica, responde de inmediato a las dudas, y el boletín mensual siempre ofrece contenidos de mucho interés.

Debo decir también que utilizo intensivamente internet para todas mis gestiones, icluida la búsqueda de información cuando quise comprar la Thermomix TM31. Abigail contestó de inmediato a mis peticiones de información, y sin embargo aún estoy esperando que la web "oficial" de Teresa Basterrechea se ponga en contacto conmigo, desde el pasado mes de noviembre, y tras no menos de tres mensajes de petición de información en noviembre y diciembre pasados.

Es obvio que no hacen falta más comentarios.

Animo a quien quiera un buen servicio que compre la Thermomix a través de Abigail.

nemado dijo...

Mucho ánimo Abby. Estás haciendo un trabajo formidable. Y debe ser lo que escuece a la gente de Vorwerk, el hecho de que no tengamos que conseguirles más clientes para que podamos disfrutar de más recetas y consejos, totalmente gratis. La verdad es que creo que hablo por casi el 100% de los usuarios de thermomix si te digo que mucho cambiarían las cosas (y sería a mejor) si se decidiesen a vender sus libros. Los compraríamos todos, y estaríamos el doble de satisfechos que ahora, con lo que el boca a boca sería más efectivo. A mucha gente lo que le tira "atrás" además del precio, es la forma de conseguir los libros, que no es más que un mero chantaje: nos traes ventas=tienes libros, no ventas=no libros. Craso error. Internet es demasiado grande y hoy día una herramienta fundamental, por lo que con páginas como la tuya y foros nos servimos perfectamente, y no necesitamos estar convenciendo a nadie para conseguir más recetas.

Mucho ánimo y sigue como hasta ahora, Abby. Te apoyamos.

Un abrazo.